Proceso de Individuación


Por Lic. Anahí Inda
Según el planteamiento Jungiano la organización del Individuo se constituye por opuestos.
Recordemos que, lo que llamamos Yo reside en una parte de la Persona. El término latino Persona, tiene entre otros significados, el mismo que la voz griega Prosopon, que significa Máscara: se trata de la máscara que cubría el rostro del actor griego en la Tragedia; entonces Persona es el “Personaje”, a veces se hace derivar Persona del verbo “personare”, sonar a través de algo, de un orificio o concavidad, hacer resonar la voz, como la hacía resonar el actor a través de la máscara.
Para C. Jung, quien no realiza el proceso de Individuación, no llega a su Plenitud Humana; y para conseguir esta plenitud, el camino es ir resolviendo los opuestos de los que estamos conformados, iniciando por la Persona, es decir por nuestras máscaras.

Dinámica del Proceso de Individuación
Podemos permanecer toda nuestra vida identificados con la Persona o Máscara, esta identificación, con un determinado prototipo de Persona, hace que el Yo se cierre al proceso de Individuación, esta condición es llamada por Jung Desindividuación: El hombre queda poseído por su Persona.
Para Heidegger el hombre que hace “lo que se hace” vive una Existencia Inauténtica.
Para poder llegar a ser “Sí Mismo”, se supone que se debe realizar un desplazamiento interior desde el Yo-Persona al Yo- en la Mismidad.
Este trabajo se va realizando como un movimiento Progresivo por un lado y Regresivo por el otro, es decir es oscilante, no es un movimiento lineal, sino que va yendo y viniendo, se realiza entre flujos y reflujos.
El movimiento Progresivo, se realiza en el avance a la adaptación, a las exigencias de la conciencia, a la resolución de los conflictos mediante la síntesis de los contrarios. Se necesita, para ir enfrentando la vida cierta actitud y función. En este proceso estamos frente a una extroversión de la energía vital llevada al máximo. Se realiza desde una intencionalidad para ir logrando los objetivos.
El movimiento Regresivo, va conduciendo a una indiferenciación y una confusión funcional, es decir se va realizando una desadaptación al mundo exterior, y se van desbordando las exigencias internas inconcientes dentro de nosotros. Nos hallamos frente a una introversión de la energía vital, hacia dentro. Se desciende en el nivel de la conciencia por ejemplo en los sueños.
Vamos viendo que el camino de la Individuación consiste, en estos términos, en ir bajando varias veces a los infiernos e ir subiendo otras tantas al mundo exterior y adaptándonos a él.

1° Paso
Se toma conciencia de que uno no es el Yo-Persona, ¿cómo se accede a esta toma de conciencia? Es por motivación, no, no lo es, tampoco está causada, no hay deseo, la Persona desconoce su sombra, hay algo, un hecho exterior, un algo interior que nos conmueve, que nos precipita.
El individuo comienza a decirse, Yo no soy sólo esto, yo no soy mis proyectos, yo no soy la imagen que los demás tienen de mí, yo no soy..., se inicia la búsqueda de un yo desconocido, comienza a desligarse de las estructuras convencionales, comienza a desidentificarse de la Persona, pero al mismo tiempo comienza a sentirse perdido porque ya los caminos que le eran seguros, dejan de serlo, y esto le genera desconcierto, inseguridad.

2° Paso El encuentro con la Sombra
Cuando el individuo ha dejado de lado el reconocimiento social que necesitaba desde su Persona, los convencionalismos a los que estaba acostumbrado, comienza a descubrir en sí mismo cualidades negativas.
Si no se toman posturas ni justificadoras, ni condenatorias, y si tampoco se acusa como causa de las mismas al ambiente, cultura, educación, autoritarismo de los padres, etc. Se comienzan a hacer cada vez mas nítidas y comprensibles al yo, una forma de evitar incorporar al yo los impulsos que subyacen a esas características que se van descubriendo, es autojustificarse mediante remordimientos, sentimientos de culpa, ya que, con esta estrategia, la Persona haciéndose juez de su Yo, como 'objeto de la moral', se exime de aceptar la 'otra parte', se cae en la trampa de 'lavarlos' y de esa manera tampoco aceptarlos.
Pero si el individuo no toma una actitud ni de repulsa ni de autojustificación, pronto van apareciendo en sueños o en fantasías manifestaciones de estos aspectos y maneras de ser que fueran negadas a sí mismo. Apareciendo su otra faz.
Simultáneamente por la facilidad de proyección que tiene la sombra, se ve cada vez mas intensamente, las 'faltas' de los demás, egoísmo, pereza, sensiblería, indiscreción, etc.
Es un proceso de descubrimiento de nuestra parte oculta, no agradable para nosotros mismos, como así también, de aquellos aspectos no propiciados, o de actividades no pensadas para el individuo, condiciones de músico, etc.
Al cabo de esta etapa, el individuo ha cambiado mucho, “ya no juzga, ni aplaude, ni condena, porque ha asumido el lado negativo de lo admirable y el lado positivo de lo vituperable”
El individuo se hace más comprensivo, se ve más semejante al resto de los individuos, y va siendo cada vez mas profundo.

Bibliografía consultada: C.G.Jung “Arquetipos e Inconciente colectivo” Ed. Paidós. Barcelona 1984/ M. Rojo “Exposición metódica de la psicología de los “complejos” de Carlos G. Jung” Ed. EUNIBAR Barcelona 1982/ Vicente Rubino “Acerca del Problema del Hombre” Serie Filosófica Ed. Uflo

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